(La Paz, 19 de junio, Viceministerio de Comunicación). - La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, rechazó contundentemente la propuesta de nueva Constitución del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada y reafirmó su compromiso de defensa del Estado Plurinacional, que no permitirá que retorne la republica colonial y el modelo neoliberal al país.
La autoridad nacional dijo en conferencia de prensa que dicha propuesta tiene como pretensión la rearticulación de la derecha, como lo sucedido en 2019, cuando se buscó una República para unos pocos, excluyente, racista y discriminatoria, de saqueo a los recursos naturales y de sometimiento a intereses imperiales y externos.
Expresó que se pretende llamar la atención al bautizar “como la construcción de todos” a una propuesta que presenta un conjunto de ideas retrogradas y, fracasadas, y que el pueblo boliviano conoce su llamado “Plan de Todos” que disfrazó y benefició los intereses corporativos, transnacionales e individuales y egoístas de un pequeño sector a costa de las grandes mayorías, como fue el pueblo boliviano y de la Patria.
Asimismo, indicó que esta propuesta de Sánchez de Lozada es una vuelta a la esencia del gonismo y neoliberalismo para unos pocos.
“La capitalización que hace referencia, con nostalgia en dicha propuesta es un desconocimiento absoluto de la lucha del pueblo boliviano, al carácter diverso a esa plurinacionalidad que es el corazón que somos todos los bolivianos”, apuntó.
De igual manera invalida e invisibiliza y desconoce la resistencia de esa lucha de los pueblos por apostar a la construcción de un Estado Plurinacional, trabajada por primera vez de manera colectiva e histórica en una Asamblea Constituyente.
Aclaró que Gonzalo Sánchez de Lozada, continúa viendo a los bolivianos como un conjunto de individuos en la que los privilegios y no derechos, son para pocos e invisibiliza el concepto pueblo, naciones en la que existe una articulación armoniosa de lo colectivo con lo individual rumbo al “Vivir Bien”.
Afirmó que una propuesta venida desde el gonismo es profundamente antidemocrática y refleja el desconocimiento de la realidad de los bolivianos.
“Su propuesta dirige a una democracia delegada donde el pueblo no decide y no participa, sino que el presidente pasa a ser elegido por el poder legislativo y no un poder en las urnas, mediante el voto ciudadano, lo que significaría un retroceso frente a la Constitución Política del Estado que conduciría a esa fracasada partidocracia”, aseguró.
Afirmó que, en materia económica, la propuesta es neoliberal, pues habla de la transnacionalización de la economía y de los recursos naturales, donde el Estado pasa a ser un simple regulador que desconoce las grandes demandas históricas de la Asamblea Constituyente y el fin del Neoliberalismo.
De igual manera aseveró que el Gobierno se constituye en un simple observador de la libre competencia y “dejar todo en la mano invisible del mercado”.
En lo referente a derechos, dicha propuesta cercena muchos de ellos, fundamentalmente de las naciones indígenas originarias campesinas, de las juventudes donde se amplía para una Asamblea Constituyente a 25 años para diputados y a 35 años para senadores.
En la organización territorial del Estado, sostuvo que ésta cercena también los derechos de la organización territorial, se elimina la autonomía originaria campesina, el presidente deja de ser electo por el pueblo, se selecciona por dos tercios en el Congreso, el primer ministro se elige entre los parlamentarios, entre otros.
Otro riesgo que hizo hincapié fue a la tenencia de la tierra y la propiedad colectiva comunitaria, la cual podría disolverse y venderse parceladamente en un todo o una parte por quienes tienen la propiedad colectiva de la tierra.