El jefe de Estado, acompañado del vicepresidente Davis Choquehuanca y la ministra de la Presidencia María Nela Prada, recibió obsequios de los artesanos que se dieron cita en la Feria de la Alasita, en inmediaciones de la Plaza Murillo.
Asimismo, el mandatario compró una serie de objetos para luego realizar el sahumerio de las miniaturas de Alasita, que forma parte del ritual para bendecir las artesanías.
La ministra María Nela Prada manifestó que en la feria de la Alasita no solo se observa la fe, el compromiso con la cultura, sino también ese movimiento económico de generan los productores a través de sus productos en miniatura.
La autoridad nacional lamentó que esta actividad haya sido perjudicada por los bloqueos de caminos ya que muchos artesanos no pudieron llegar de otras regiones del país.
La Fiesta de la Alasita es una de las celebraciones más tradicionales en la ciudad de La Paz en Bolivia. La característica principal de esta festividad es la venta de miniaturas, productos agrícolas, piedras circulares de colores o con alguna particularidad. Este intercambio se practicaba con alegría y con la esperanza de tener, durante todo el año, los productos adquiridos.